Chocolate!

Pinchar los extremos de las galletas de champán con una brocheta. Poner 125 g de chocolate en polvo en el propio envase del chocolate, sumergir las galletas en él y luego verter la leche. Dejar que los bizcochos absorban la leche y reservar.

Derretir 125 g de chocolate negro y 90 g de chocolate blanco. Verter el chocolate negro derretido sobre una tira de papel film y reservar en un plato durante 10 minutos en el refrigerador. Derretir 100 g de chocolate negro, verterlo junto con el chocolate blanco derretido en la placa fría y dejar que se endurezca. Hacer virutas de chocolate con la ayuda de una cuchara y meter en el refrigerador. Derrita el resto del chocolate blanco y verter en una bolsa de congelación.

Colocar la tira de chocolate sobre la mesa, calentar ligeramente el borde de la tira con una cerilla y envolver el paquete de chocolate en polvo. Retirar la tapa, vierta el resto del chocolate negro en el interior y refrigerar durante 30 minutos. Montar la nata, el mascarpone y el chocolate hasta formar una crema batida y colocarla en una bolsa de congelación.

Desmoldear el chocolate del paquete en un plato, cortar la punta de la bolsa de congelación y utilizarla para rellenar el molde de chocolate hasta la mitad con la nata montada. Colocar las galletas de champán mojadas encima, cubrir con más nata montada, espolvorear con las pepitas de chocolate y el resto del chocolate en polvo y verter el glaseado de chocolate por encima. Cortar la esquina inferior de la bolsa de congelación, formar una línea con el chocolate blanco restante alrededor de los bordes del glaseado de chocolate y ¡buen provecho!